Shalom Israel !

Hay viajes que tienes pendientes durante años y años, y un día (por casualidad, suerte ó alineación de astros) puedes realizar.Para mí, uno de esos viajes pendientes era Israel… y ahora ya puedo decir que está en mi lista de viajes soñados realizados.

Antes de pasar a comentar el apartado gastronómico, unos apuntes generales:

• Es una obviedad, pero si vas fuera de temporada los precios de los billetes de avión son extremadamente competitivos. Yo he viajado con Norwegian Airlines y ha sido perfecto.
• Cuando llegues al aeropuerto y te acerques a tomar un medio de transporte (tren, bus o taxi) verás que, aunque a veces tengamos una visión de que Israel está en estado de guerra, es un país tranquilo. Y sí, al principio te sorprenderá ver a soldados (armados) que van a tomar un transporte público con su arma. 
• Ten en cuenta que, para evitar posibles acciones terroristas, en estaciones de tren, centros comerciales, etc. vas a encontrarte controles con arcos detectores, etc. 
• Y hablando de transportes públicos, la red ferroviaria del país está muy bien. Útil y práctica la app de Israel Railways (horarios, recorridos, precios…).
• En la mayoría de sitios (además de en hebreo) encontrarás también los carteles-indicaciones en inglés.

• Y si no, echa mano de algún lugareño: gente amable que hará un esfuerzo por comunicarse contigo y ayudarte.
• ¡Ah! verás que hay mucha y mucha gente que habla- chapurrea español.
• Recuerda que estás en Israel, y que ellos celebran el Sabbath. Así que debes tener en cuenta que en la tarde del viernes y durante el sábado puedes encontrar cerrados algunos restaurantes y tiendas, además de no haber trenes… Los buses y taxis funcionan con normalidad. 
• Y hablando de taxis, yo he utilizado la aplicación de Uber para pedirlos… aunque en Israel también se utiliza Gett. Precios correctos.
• Y una vez en la calle notarás:

1. que los conductores adoran tocar el claxon más que usar los intermitentes. Paciencia. 
2. que las bicis y patinetes eléctricos lo están petando.
3. que eso de la preferencia de paso por las aceras y cederlo a otros es algo desconocido en estos lares.

Y después de estos breves apuntes de mundología callejera local, hablemos de gastronomía… local, por supuesto:

Israel es un batiburrillo (toma palabrita) de cocinas de la zona, así que prepárate para degustar platos no solo de la tradición judía. Y hablando de tradición judía, recuerda que ellos se rigen por las normas Kosher (o kasher) a la hora de tratar los alimentos. Y que en Israel hay judíos venidos de todo el mundo… así que encontrarás comida de tooooodo el mundo. 
¿Platos para probar? Yo no me iría de Israel sin comer hummus, shakshuka, labneh, shawarma, falaffel… porque sería como no haber estado en el país. Os comentaré algunos de los locales que me parecieron interesantes en mi periplo por tierra santa: 

En Tel Aviv:

Nina Café

En este café-restaurante de Neve Tsedek (barrio de moda en Tel Aviv) entré por casualidad, y me encontré con una ensalada con pollo especiado deliciosa (jugosa, rica…)

The House of humus

Ya se que el nombre es un poco spoiler de lo que os vais a encontrar en este local de King George Street… pero el hummus allí es un espectáculo, y punto. También probé su labneh y shakshuka, que también están ricos, pero ese humus…  y  además está junto al animadísimo y popular Karmel Market, donde podéis comprar frutas, especias, quesos, dulces… 
¡Ah! Y el personal una delicia… ¡tanto como el hummus!

Haj Kahil

Sitio pequeño en la zona del puerto de yaffo. Templo del shawarma, y el de cordero…. ¡una locura! Y a precio más que bueno.

En Jerusalem:

En esta ciudad santa para católicos, judíos y musulmanes solo paré en Naarei Há Marbad… y pude disfrutar de su (brutal) falaffel.

En Netanya:

En zona costera, turística, fui a almorzar junto a la playa al CafeCafe. Almuerzo completo y típico.

Uno de los establecimientos en los que paré varias veces fue Uzi-Uli, sitio en el que tomar deliciosos zumos. El que más me gustó fue el Ginger Apple, con un punto picante más que rico.

Ya se, ya se, que os sorprenderá que aun no os haya hablado de cerveza artesana… pero si, he visitado algunos locales cerveceros (y probado unas cuantas cervezas israelíes):

Beer Shop  (Tel Aviv)

Local junto a mi alojamiento (mira tú por donde) con 30 grifos, varios con sus propias cervezas. 

Dancing Camel (Tel Aviv)

En una calle perdida encontré este bar, donde probé su 1872… una rica baltic porter.

Beer Bazaar (Tel Aviv y Jerusalem)

En su local de Jerusalem probé dos cervezas que me encantaron: una tripel belga y una coconut porter… que repetí en una segunda visita a la ciudad santa.

Antes os hablé del Karmel Market, pero os animo a disfrutar de los mercados de Israel y de sus colores, olores y sabores… ¡una fiesta para los sentidos!

Y disfrutando entre mercados, restaurantes, cervecerías, museos, calles y lugares sagrados pasé diez días; aunque me quedaron muchos sitios por conocer en Israel, espero que en una próxima visita. Lehitraot Israel.

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