Zaragozando

Todos sabemos que hay regalos que los carga el diablo, y esas cajas con experiencias en sitios con presunto “encanto”, más.

A mí (que en el fondo también soy persona) también me las regalan… y, aprovechando uno de esos engendros “regaleros” me planté el pasado fin de semana en Zaragoza (mi ciudad natal), que hacía bastante tiempo que no visitaba.

Tomé nota de las sugerencias sobre locales cerveceros de mis contactos en FB y pude visitar dos de ellos:

El sábado me pasé por La Cebada (Caminos del Norte 24) a tomar un par de cervezas. Me gustó el local, el trato y las cervezas. La pena es haber ido después de hacer un vermut-tapeo amplio y no tener hambre, porque hubiéramos aprovechado para dar cuenta de su carta…. ¡porque La Cebada está abierta a mediodía! Punto positivo, sin duda.

El domingo tuve el placer de vermutear en plena Plaza del Pilar, y después me acerqué a Hoppy (Casto Méndez Núñez, 36). Era hora de comer, así que tiramos de su carta y atacamos a las (ricas) hamburguesas (Hoppy con carne de buey y Stout con carne de ternera). De las 15 cervezas pinchadas nos decidimos por las dos de Populus (cervecera que radica en Caspe), la Ipa y la Doble Ipa… que estaban muy ricas.

Pero no, no sólo probé cervezas y más cervezas en la capital de Aragón, no… también aproveché para disfrutar de algunas delicias gastronómicas, sobretodo reposteras:

Al ladito de Hoppy se encuentra Fantoba (Don Jaime I, 21), una pastelería que lleva endulzando la vida de los zaragozanos desde 1856; si os pasáis por allí podréis encontrar multitud de cosas ricas, desde un tremendo (y finísimo) guirlache hasta (entre otros muchos dulces) unas yemas, pasando por las más que típicas (y riquísimas) frutas de Aragón. Visita más que recomendada.

 

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